El amor es la conjunción de hechos y acciones del carácter más hermoso, realizadas por los seres humanos. Es la bondad del alma desnuda tendiendo la ayuda más simple sin previo aviso. Son las simplezas de los hechos las que conllevan acciones de grandeza. Es ese beso esperando por salir hacia la luz, con cierto miedo del no saber si será correspondido, son las manos sudorosas, el palpitar del corazón acompañado a ritmo casi místico cada una de las palabras. Es arriesgar todas las caratas de la baraja, dar la vida por otra persona, olvidarse de uno mismo y entender que la felicidad de otra persona es lo más importante. Perder todo signo de egoísmo, mirarte a los ojos mi luz y perderme dentro de ellos.

 

Buscar la luz del corazón es hallar a esa persona, esa alma gemela que te acompañara a trazar el camino de la vida, es la unión que marca el destino en nuestro sendero, quizás sin darnos cuenta la tenemos a nuestro lado y por la ingenuidad propia no podemos abrir los ojos y observar el mundo detenidamente, para darnos cuenta que esa persona siempre a estado a nuestro lado, con simplezas ha cambiado nuestro entorno y la vida misma.

 

Encontrar la luz de tu corazón es entregar tu alma en las manos de otra persona, esa persona a la cual amas con todo tu ser, por la cual darías todo lo que tienes… hasta incluso aquello a lo que nunca alcanzarías, por que la fuerza del corazón supera todas las barreras, y nos hace conseguir hasta lo que pensábamos que era imposible. Querer es poder… y con entrega y sacrificio todos los muros del alma serán derribados,

 

La luz de mi corazón son esas ganas de seguir viviendo la vida, las ganas de apostar a más y nunca rendirme. Vivir la vida que es tan solo un momento, son pequeños conjuntos de emociones, las cuales deberíamos disfrutar todas y cada una de ellas…